Franja Sur. Peña Nieto: primero los ricos
27.06.2016 17:26
El poema de Francisco de Quevedo “Poderoso caballero es don dinero” y la expresión popular “ley del embudo” que reza: “lo ancho para unos y lo estrecho para otros”, encajan perfectamente en la situación que atraviesa actualmente el país con la reforma educativa y la llamada ley 3 de 3 como parte del Sistema Nacional Anticorrupción, en donde se ha visto un trato desigual del gobierno federal.
Y, tal como está procediendo el primer priista del país Enrique Peña Nieto, entonces el PRI, para dejar a un lado la simulación, en los comicios presidenciales de 2018 debería usar la siguiente frase como eslogan de campaña: “Primero los ricos”, le viene como anillo al dedo.
El tema es el siguiente: el gobierno Peñista está dando a todas luces un trato diferencial en los alegatos de empresarios y maestros. Como se sabe, cada uno de estos sectores se inconformó por reformas a la ley, impulsadas desde la administración federal.
Veamos: el pasado 16 de junio los empresarios mexicanos encabezados por la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) se manifestaron en el Ángel de la Independencia de la Ciudad de México, en rechazo a la legislación secundaria del Sistema Nacional Anticorrupción, cuya ley 3 de 3, además de los servidores públicos, se aplicaría también a los empresarios.
La inconformidad de la iniciativa privada derivó, entre otros aspectos, de la inclusión en el artículo 32 de la Ley General de Responsabilidades que los “obliga a la declaración patrimonial, de intereses y fiscal a las personas físicas o morales que reciban y ejerzan recursos públicos o contraten bajo cualquier modalidad con entes públicos, además de aquéllas que presten sus servicios o reciban recursos de las personas morales que tengan tratos con el Gobierno”.
Una sola movilización de un pequeño grupo de hombres de la iniciativa privada, los dueños del dinero en México, bastó para que la noche del 21 de junio, cinco días después de su protesta en el Ángel, el presidente Peña Nieto recibiera en Los Pinos a las cúpulas empresariales.
Y, no sólo eso, el Presidente ni tardo ni perezoso frenó parcialmente la dichosa ley, debido al reclamo de los empresarios. El 24 de junio los medios dieron a conocer que el mandatario federal decidió vetar el artículo 32 de la Ley Federal de Responsabilidades Administrativas del Sistema Nacional Anticorrupción (ley 3 de 3), que había aprobado la semana pasada el Congreso de la Unión.
Según el sector empresarial “la ley es excesiva e inoperante”, pues dicen que “atenta contra los derechos humanos, además sería imposible procesar millones y millones de declaraciones”.
Bien, el movimiento magisterial tiene tres años reclamando lo “inoperante” de la reforma educativa, la cual califican de lesiva para el derecho laboral de los maestros. Han realizado infinidad de protestas, manifestaciones y el gobierno Pañista, después de 36 meses de movilización magisterial, que ha dejado ya al menos 10 muertos, más de cien heridos y detenidos, apena la semana pasada Peñas Nieto decidió que la Secretaría de Gobernación se siente a dialogar con dirigentes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE).
El secretario de educación Aurelio Nuño ha argumentado que no se puede modificar ni abrogar una ley ya aprobada. Entonces, ¿cómo en la ley 3 de 3, sí se pudo, tras la presión de una raquítica protesta de los dueños del dinero?
Y, ¿por qué esos manifestantes fueron atendidos en Los Pinos por el propio Peña Nieto y enseguida procedió a darle respuesta positiva a sus demandas? Ahí está el detalle, de este México nuestro que no cambia.
La botica
1.- De 31 mil 715 millones de pesos fue el recorte al gasto público, según anunció el fin de semana pasado Luis Videgaray Caso, secretario de Hacienda y Crédito Público, ello derivado de la salida de Gran Bretaña de la Unión Europea, esto es, debido al efecto Brexit. A seguir, pues, sufriendo por la falta de circulante y el galopante desempleo a lo largo y ancho de México.