Jóvenes mexicanos triunfadores
26.10.2016 13:08
Jóvenes mexicanos triunfadores
Manuel Araujo Martínez
Para quienes estamos en la docencia, siempre es grato saber de los logros de estudiantes mexicanos en competencias internacionales en cualquier materia. Por ello, cansado ya de noticias de políticos corruptos, ineficiencias gubernamentales, injusticias e inseguridad, retomo noticias más alentadoras y positivas, “que también cuentan y cuentan mucho” (como decía el slogan de la publicidad oficial del reciente Informe de Gobierno del presidente Enrique Peña Nieto) a riesgo de que me acusen de “entreguista”; pero no es el caso, créanme.
Hagamos un breve repaso: Recientemente se dio a conocer que Yair Israel Piña López, alumno de la Facultad de Ciencias de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) con apenas 20 años de edad, fue aceptado como estudiante-investigador por la National Aeronautics and Space Administration (NASA). Lo anterior, gracias a su trabajo en el desarrollo de materiales con propiedades termoluminiscentes para la medición de radiación en el espacio, lo cual puede aplicar en el cuidado de la salud de los astronautas en sus viajes fuera de nuestro planeta.
También, una delegación de jóvenes tuvo un papel destacado en la VIII Competencia Iberoamericana Interuniversitaria de Matemáticas, celebrada en Brasil en septiembre de este año, al obtener tres medallas de oro, una de plata y una de bronce, además de mención honorífica.
Los mexicanos se llevaron estas preseas compitiendo con 65 jóvenes de países como Argentina, Brasil, Colombia, Costa Rica y Ecuador. El siguiente reto para ellos será en 2017, cuando estos alumnos de la UNAM se midan con sus pares europeos en la Competencia Internacional de Matemáticas que se llevará a cabo en Bulgaria.
Otro ejemplo que debe enorgullecernos a todos es el de los estudiantes del Tecnológico Nacional de México (TecNM) que obtuvieron el primer lugar y la medalla de oro en el Torneo Mundial de Robótica Robotchallenge 2016, realizado en Viena, Austria. Los ganadores, miembros del club de robótica del Instituto Tecnológico Superior de Poza Rica, encabezaron las categorías de Seguidor de Línea Avanzado, con el robot “XF-11”, y Microsumo, con el prototipo “TOM”. Durante su participación, en la que compitieron contra dos mil robots de 56 países, los alumnos del TecNM también obtuvieron las medallas de plata y bronce con los robots “Mayk” y “El Chavo”, cronometrando 8.29 y 12.49 segundos, respectivamente, en la categoría de Carrera de Humanoides.
Haciendo justicia a la equidad de género (y para no variar, siempre sacando la cara por nuestro país), jóvenes mujeres mexicanas también se alzaron con grandes triunfos en la quinta edición de la Olimpiada Europea de Matemáticas para Niñas, celebrada en abril de este año en Rumania. Ahí, dos chicas de Jalisco y Morelos, lograron adjudicarse la medalla de oro y otra de plata, respectivamente.
Pero hay más, y conste que son sólo algunos ejemplos recientes de lo mucho logrado por nuestros jóvenes. Otras pequeñas, todavía menores (de entre nueve y 11 años de edad), compitieron el año pasado en el concurso Moonbots Challenge del Google Lunar XPRIZE, en el cual se enfrentaron con 25 equipos de 29 países, y quedaron en el primer lugar empatadas con dos equipos de Estados Unidos y otro de Italia, por lo que tuvieron la oportunidad de viajar a Japón como premio. Estas pequeñas diseñaron cinco misiones espaciales usando una robot que nombraron “Ixchel” (Diosa de la Luna). La escuela donde estudian estas niñas se encuentra en Cuautitlán Izcalli y el director del club de robótica Liks, el profesor Adolfo Ferrer Jaime, de apenas 21 años, encausa a sus alumnos y alumnas en la ciencia desde edades tempranas.
Por último, siendo otro caso muy emblemático, el del joven Denzel del Ángel, quien a pesar de que padece el síndrome de Asperger, esto no lo limitó para participar en noviembre pasado junto con otros dos compañeros, todos de 15 años, en la Olimpiada Mundial de Robótica, realizada en Doha, Qatar. En ese concurso, que se caracteriza por la creación de robots con piezas de Lego, obtuvieron un orgulloso tercer lugar.
Constatamos así que en cualquier lugar de nuestra república podemos encontrar niñas, niños y jóvenes que en las condiciones adecuadas y con la guía de profesores comprometidos pueden desarrollar todo su potencial creativo.
Estos hechos nos impulsan a los docentes a redoblar el esfuerzo por transmitir a los alumnos conocimiento y a motivarlos a aprender, a descubrir sus propios talentos y, sobre todo, a innovar y a ser creativos para la resolución de problemas. Talento hay en México y mucho en nuestros niños, niñas y jóvenes, como ya constatamos con estos ejemplos. Corresponde a autoridades, instituciones educativas, directivos y docentes poner las bases sólidas para que nuestros pupilos despeguen y demuestren al mundo que los mexicanos y mexicanas también proponen soluciones a los nuevos retos de la actividad humana.
Para quienes estamos en la docencia, siempre es grato saber de los logros de estudiantes mexicanos en competencias internacionales en cualquier materia. Por ello, cansado ya de noticias de políticos corruptos, ineficiencias gubernamentales, injusticias e inseguridad, retomo noticias más alentadoras y positivas, “que también cuentan y cuentan mucho” (como decía el slogan de la publicidad oficial del reciente Informe de Gobierno del presidente Enrique Peña Nieto) a riesgo de que me acusen de “entreguista”; pero no es el caso, créanme.
Hagamos un breve repaso: Recientemente se dio a conocer que Yair Israel Piña López, alumno de la Facultad de Ciencias de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) con apenas 20 años de edad, fue aceptado como estudiante-investigador por la National Aeronautics and Space Administration (NASA). Lo anterior, gracias a su trabajo en el desarrollo de materiales con propiedades termoluminiscentes para la medición de radiación en el espacio, lo cual puede aplicar en el cuidado de la salud de los astronautas en sus viajes fuera de nuestro planeta.
También, una delegación de jóvenes tuvo un papel destacado en la VIII Competencia Iberoamericana Interuniversitaria de Matemáticas, celebrada en Brasil en septiembre de este año, al obtener tres medallas de oro, una de plata y una de bronce, además de mención honorífica.
Los mexicanos se llevaron estas preseas compitiendo con 65 jóvenes de países como Argentina, Brasil, Colombia, Costa Rica y Ecuador. El siguiente reto para ellos será en 2017, cuando estos alumnos de la UNAM se midan con sus pares europeos en la Competencia Internacional de Matemáticas que se llevará a cabo en Bulgaria.
Otro ejemplo que debe enorgullecernos a todos es el de los estudiantes del Tecnológico Nacional de México (TecNM) que obtuvieron el primer lugar y la medalla de oro en el Torneo Mundial de Robótica Robotchallenge 2016, realizado en Viena, Austria. Los ganadores, miembros del club de robótica del Instituto Tecnológico Superior de Poza Rica, encabezaron las categorías de Seguidor de Línea Avanzado, con el robot “XF-11”, y Microsumo, con el prototipo “TOM”. Durante su participación, en la que compitieron contra dos mil robots de 56 países, los alumnos del TecNM también obtuvieron las medallas de plata y bronce con los robots “Mayk” y “El Chavo”, cronometrando 8.29 y 12.49 segundos, respectivamente, en la categoría de Carrera de Humanoides.
Haciendo justicia a la equidad de género (y para no variar, siempre sacando la cara por nuestro país), jóvenes mujeres mexicanas también se alzaron con grandes triunfos en la quinta edición de la Olimpiada Europea de Matemáticas para Niñas, celebrada en abril de este año en Rumania. Ahí, dos chicas de Jalisco y Morelos, lograron adjudicarse la medalla de oro y otra de plata, respectivamente.
Pero hay más, y conste que son sólo algunos ejemplos recientes de lo mucho logrado por nuestros jóvenes. Otras pequeñas, todavía menores (de entre nueve y 11 años de edad), compitieron el año pasado en el concurso Moonbots Challenge del Google Lunar XPRIZE, en el cual se enfrentaron con 25 equipos de 29 países, y quedaron en el primer lugar empatadas con dos equipos de Estados Unidos y otro de Italia, por lo que tuvieron la oportunidad de viajar a Japón como premio. Estas pequeñas diseñaron cinco misiones espaciales usando una robot que nombraron “Ixchel” (Diosa de la Luna). La escuela donde estudian estas niñas se encuentra en Cuautitlán Izcalli y el director del club de robótica Liks, el profesor Adolfo Ferrer Jaime, de apenas 21 años, encausa a sus alumnos y alumnas en la ciencia desde edades tempranas.
Por último, siendo otro caso muy emblemático, el del joven Denzel del Ángel, quien a pesar de que padece el síndrome de Asperger, esto no lo limitó para participar en noviembre pasado junto con otros dos compañeros, todos de 15 años, en la Olimpiada Mundial de Robótica, realizada en Doha, Qatar. En ese concurso, que se caracteriza por la creación de robots con piezas de Lego, obtuvieron un orgulloso tercer lugar.
Constatamos así que en cualquier lugar de nuestra república podemos encontrar niñas, niños y jóvenes que en las condiciones adecuadas y con la guía de profesores comprometidos pueden desarrollar todo su potencial creativo.
Estos hechos nos impulsan a los docentes a redoblar el esfuerzo por transmitir a los alumnos conocimiento y a motivarlos a aprender, a descubrir sus propios talentos y, sobre todo, a innovar y a ser creativos para la resolución de problemas. Talento hay en México y mucho en nuestros niños, niñas y jóvenes, como ya constatamos con estos ejemplos. Corresponde a autoridades, instituciones educativas, directivos y docentes poner las bases sólidas para que nuestros pupilos despeguen y demuestren al mundo que los mexicanos y mexicanas también proponen soluciones a los nuevos retos de la actividad humana.