La electricidad, cara a pesar de las reducciones de tarifas
15.06.2015 08:12
Disponer de tarifas eléctricas competitivas para el sector industrial y contar con un servicio de aprovisionamiento articulado a partir de principios tales como eficiencia, calidad y bajo costo, sólo será posible a partir de:
- El aumento en la productividad y competitividad de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), a partir de la reestructuración operativa y tecnológica emprendida pese al impacto del recorte presupuestal de 2015;
- y la integración y funcionamiento eficiente del mercado eléctrico mayorista que permitirá, a partir del 1 de enero de 2016, a los usuarios que consuman más de 3 megawatts elegir al proveedor que le ofrezca y garantice las mejores condiciones en lo concerniente al aprovisionamiento del fluido eléctrico.
Se trata de avanzar hacia cuatro metas prioritarias: competencia en el sector eléctrico, transición hacia las mejores tecnologías disponibles, reducción de costos y mejores tarifas para los usuarios finales. De todo ello depende el cierre a la brevedad posible de la brecha existente entre México y nuestros principales competidores a escala mundial.
Estamos frente y una condición indispensable para dotar a la industria mexicana de condiciones que le permitan afrontar la intensa competencia por el mercado interno y los mercados foráneos.
¿Por qué es tan importante acrecentar la competencia en el mercado energético y reducir consistente y aceleradamente el precio de la electricidad en México?
- Porque a pesar del descenso observado en las tarifas para el sector industrial, éstas siguen siendo superiores a las de nuestros principales socios comerciales.
- Y porque una vez concretada la reducción de tarifas a niveles competitivos, ello ofrecerá un impulso de alrededor de medio punto porcentual al crecimiento de nuestra economía, de acuerdo con la estimación realizada por la consultora Standard & Poor's (S&P).
En consecuencia, disciplinar tarifas y asegurar una elevada calidad en el servicio a la brevedad posible, es un asunto prioritario para el sector productivo.
Si bien el esfuerzo realizado hasta ahora en la instrumentación de la reforma energética apunta en la dirección correcta, es recomendable acelerar el paso para llevar el precio y la calidad del servicio electricidad a los estándares deseables, pues el avance logrado en la reducción de 25% a 35% en las tarifas aplicables al sector industrial en junio respecto al mismo mes del año anterior, responde fundamentalmente a la sustitución de combustibles caros (combustóleo y diésel) por gas natural, cuyo precio ha descendido en 40% aproximadamente.
Desde luego, el empleo de un combustible más barato y amigable con el medio ambiente es una decisión acertada, que debe complementarse con todo un esfuerzo de inversión para disponer de la infraestructura necesaria para consolidar el cambio estructural que necesita el sector eléctrico, pues de ello dependerá su capacidad de respuesta frente a las necesidades de una economía que debe acelerar el paso, lo que significa un consumo de energía eléctrica a un ritmo mayor al mostrado hasta ahora.
Y es que de acuerdo con un ejercicio de prospectiva del sector eléctrico, elaborado por la Secretaría de Energía para el periodo 2014-2018, si la economía mexicana avanza a un ritmo de crecimiento promedio anual de 3.7%, el consumo de energía eléctrica avanzará a una tasa anual promedio de 4.6%.
La diferencia en el ritmo de ambos indicadores plantea la necesidad de planear las inversiones, los proyectos y las metas que permitan atender los requerimientos del presente, la demanda futura y las exigencias de competitividad y modernización tecnológica que deben estar presentes en la operación del sector eléctrico.
Fortalecer la tendencia a la baja en costos y tarifas requerirá entre otras cosas, de:
1. Avanzar en la articulación del Sistema Nacional de Gasoductos, a partir de su ampliación en aproximadamente 10 mil kilómetros para permitir el aprovechamiento del gas natural en aquellas regiones y plantas generadoras que no pueden aprovechar los beneficios asociados al descenso en su precio y su calidad ambiental. Esto significa incrementar en alrededor de 75% la infraestructura disponible en 2012.
Para lograr lo anterior es vital estimular al sector privado. La inyección de recursos que realice para ampliar la red de gasoductos no sólo permitirá responder a este desafío, sino además, se convertirá en oportunidad para la generación de empleos y el desarrollo regional.
Por lo pronto, seis gasoductos ya han sido terminados, siete están en construcción, cinco ya fueron adjudicados, cuatro están en proceso de licitación y once más se encuentran en fase de proyecto con una inversión estimada en 5,200 millones de dólares, para cubrir 2,300 kilómetros aproximadamente.
2. Acelerar el paso para la conversión de las centrales generadoras que dependen de combustóleo para su operación cotidiana, en instalaciones con la infraestructura necesaria para trabajar, además, con gas natural.
3. Por ello es tan importante el proyecto de reconversión de siete centrales (dos de las cuales ya están en operación) y cuya inversión total es de 200 millones de dólares, concluirá en 2016.
Este esfuerzo de reconversión enfrenta, por una parte, el estímulo proveniente del bajo costo de operación asociado al uso del gas, pero por la otra, también enfrenta restricciones presupuestales asociadas al recorte decretado para 2015 y las dificultades presupuestales que se anticipan para el siguiente año.
Sin embargo, es importante señalar que el beneficio esperado a través de esta estrategia, justifica la inversión prevista y el blindaje de los recursos presupuestales para tal propósito. En efecto, tomando como base los precios vigentes en febrero del presente año, el descenso en el costo asociado a la generación de electricidad rondaría el 62%, ya que el costo de un megawatt/hora en una planta dependiente de combustóleo es de alrededor de 1,520 pesos, cifra que se reduce hasta 570 pesos una vez realizada la reconversión.
1. Efectuar los procesos de licitación y construcción para la entrada en operación de las centrales de ciclo combinado, que favorecerán la incorporación de tecnologías de punta, el uso del energético más amigable con el medio ambiente, la obtención del más bajo costo en la generación de electricidad y la creación de condiciones apropiadas para impulsar el desarrollo de las actividades económicas de cada región.
Se estima que este tipo de plantas tienen un costo en la generación de megawatt/hora de 370 pesos, lo que significará un descenso del 75%, respecto al costo de las generadoras que operan con combustóleo.
Las inversiones estimadas para la construcción de seis centrales de ciclo combinado ascienden a 5,750 millones de dólares y su efecto sobre la actividad económica no termina con la generación eficiente y a menor costo de electricidad en beneficio de consumidores industriales, comerciales y domésticos, sino que se extiende a la ampliación de oportunidades de negocio y empleos en las localidades donde se construyan.
1. Finalmente está la modernización de la red que conecta a las centrales con los consumidores finales. México necesita articular una red de transmisión y distribución de energía eléctrica que reduzca las pérdidas del 16% del total de la energía transportada en 2012 a un porcentaje que oscile entre el 11 y el 10%.
Lograrlo requerirá inversiones por 4,450 millones de dólares para modernizar y ampliar la Red Nacional de Transmisión Eléctrica en los próximos cuatro años, de acuerdo con la Secretaría de Energía.
En suma, está en marcha el proceso de modernización, reducción de costos y tarifas en el sector eléctrico, un componente estratégico para elevar la competitividad de la economía. Hasta ahora, los primeros resultados indican que la reforma energética avanza por el sendero adecuado. Sin embargo, es importante definir las áreas en las que puede y debe acelerarse el paso para aprovechar de la mejor forma posible el impulso proveniente del bajo costo del gas natural y el interés de inversionistas nacionales y extranjeros para formar parte de la reconfiguración del mercado eléctrico del país.
Descargar en formato PDF, el ejemplar de Pulso Industrial de Concamin, correspondiente al 15 de junio de 2015.