Se deben deslindar responsabilidades, tras explosión en Cuajimalpa
Poco habremos de decir, otra vez. Reiteraremos nuestro pésame a las familias de las víctimas y nuestra solidaridad con las personas lesionadas y afectadas por la tragedia en el Hospital Materno Infantil de Cuajimalpa.
Hoy, sin embargo, sí habremos de poner el punto sobre la "i": el percance no debe quedar impune. Lo señalamos porque México es, tristemente, el país de la impunidad.
Lo ocurrido motiva varias preguntas lógicas:
1. ¿Por qué pasó?
2. ¿Hubo negligencia o impericia de los tripulantes de la pipa de "Gas Express Nieto"?
3. ¿La responsabilidad mayor recae en la empresa, por falta de mantenimiento adecuado a la unidad?
4. ¿La Secretaría de Energía (Sener) supervisa de manera adecuada aa las empresas gaseras?
Por lo demás, concluimos con otros cuestionamientos:
5. ¿Qué tan seguros son los camiones que surten gas licuado de petróleo?
6. ¿Qué tan seguro es el reparto de cilindros de gas?
7. ¿Qué tan alta, o que tan baja, es la probabilidad de que ocurra una tragedia similar?
8. ¿Qué tanto están haciendo las autoridades de Sener y de Protección Civil, para prevenir futuras tragedias?
Finalizaremos, en esta ocasión, reiterando nuestra gratitud a los cuerpos de rescate y a los civiles voluntarios que no han escatimado esfuerzos por ayudar a las víctimas. Por gente así es que México sigue de pie.