Por: Centro de Estudios Económicos del Sector Privado.
Tomado del Análisis Económico Ejecutivo correspondiente al 22 de febrero de 2016.

Por una parte, la Secretaría de Hacienda informó que realizará un ajuste preventivo para este año equivalente a 132,301.6 millones de pesos (mp), de los cuales el Gobierno Federal tendrá una reducción “efectiva de inmediato” de 32,301.6 mp, mientras que en el transcurso de esta semana el Director General de PEMEX hará la propuesta al Consejo de Administración de un ajuste por 100 mil millones de pesos. Es importante señalar que el hecho de que la estabilidad de las finanzas públicas se centre específicamente en el ajuste al gasto, sin la necesidad de ampliar los ingresos mediante un aumento de los impuestos o mayor endeudamiento, es el inicio de una rectificación de la política hacendaria.

De igual manera, la Comisión de Cambios, integrada por el Banco de México y la Secretaría de Hacienda, decidió suspender a partir del miércoles pasado, los mecanismos de ventas de dólares vigentes, aunque no se descarta la posibilidad de que Banco Central intervenga de manera discrecional en caso de que sea excepcionalmente necesario.
Si bien estas medidas pueden tener un costo en materia de crecimiento económico, y no necesariamente reduciéndolo, sino limitando un mayor dinamismo al menos este año, son las más idóneas para enfrentar la volatilidad del mercado cambiario y la fuerte presión sobre las finanzas públicas ocasionada por la rápida y significativa caída de los precios del petróleo. Son el instrumento para fortalecer la estabilidad macroeconómica en el mediano y largo plazo que permitirá sentar las bases para lograr tasas de crecimiento superiores en los próximos años.
Sin duda, estas medidas tendrán un efecto favorable en la percepción de los mercados internacionales, fortaleciendo la imagen de México como un país solvente, seguro y atractivo para la inversión.
La expectativa es que en las próximas semanas se comiencen a ver resultados favorables en los mercados. De hecho, al cierre de la jornada del día en que se dieron a conocer los cambios de política económica, el tipo de cambio FIX había recuperado 43 centavos. En este contexto se han escuchado opiniones de que el tipo de cambio podría retomar niveles similares a los observados el año pasado.
La situación por la que atraviesa nuestro país es compleja y en ese sentido una señal de fortaleza es la coordinación con la que han respondido las autoridades hacendaria y monetarias. Alinear la política fiscal y la monetaria hacia el mismo objetivo es el mejor mecanismo para fortalecer la estabilidad macroeconómica y establecer la ruta hacia un mediano y largo plazos con mayor dinamismo económico y por ende mayor bienestar de la población.
Esta reducción del gasto es el inicio de la búsqueda del equilibrio, por lo que tendremos que ver recortes adicionales en el año, en la perspectiva de llegar a 2017 con un entorno macroeconómico más fortalecido. El reto es consolidar el camino hacia un déficit y niveles de deuda menores, para lo que sin duda serán necesarios más ajustes que contribuyan a lograr la estabilidad de las fianzas públicas, de la balanza de pagos y del poder adquisitivo de las familias. No hay que olvidar que el objetivo último es precisamente el bienestar de las familias.
Gráficas: CEESP.