Franja Sur. PRI: el éxodo
16.05.2016 13:32
Armando Beltrán Tenorio, cuadro importante del PRI en la región de La Chontalpa, deja a ese partido para sumarse al Movimiento Regeneración Nacional (Morena) as quien no pocos le ven futuro en las elecciones de 2018.
Si bien es cierto que Beltrán perdió en dos ocasiones la alcaldía de Cárdenas abanderando al tricolor, hasta en la oposición reconocen que es de los pocos políticos que tiene una estructura real en ese municipio. Ahora ese capital estará al servicio de la causa de Andrés Manuel López Obrador.
Pero esta era una renuncia anunciada. Todos en la cabecera municipal de Cárdenas sabían de las pláticas y los movimientos del ex diputado local, pero en las oficinas de 16 de septiembre minimizaron su posible salida.
La renuncia de Beltrán tiene que ver con la mala estrategia de la dirigencia estatal en los comicios de 2015, pues era el candidato idóneo para volver a contender por la alcaldía, habida cuenta que en el 2012 perdió por el efecto López Obrador, ya que era mejor opción para el municipio que el perredista Avenamar Pérez Acosta, que encabezó una insulsa administración.
Sin embargo, la pésima asesoría del ex gobernador Manuel Andrade Díaz hizo que el partido enviara a Beltrán a contender por la diputación federal y le dejaron un flan al PRD con la candidatura de Miguel Ángel Moreno Piñera.
Esos errores del pasado inmediato, los seguirá pagando el PRI, partido que vivirá el éxodo de militantes a Morena, pues vienen más renuncias que se darán próximamente en los municipios de Huimanguillo, Jonuta, Jalpa, Cunduacán y Comalcalco, hasta donde sabe este franjero.
A propósito de estas dimisiones, el dirigente del PRI Miguel Ángel Valdivia muy sereno dice que su partido tiene “una base de militantes muy grande”, y manifestó que son “bienvenidos los que llegan” y dio las “gracias a los que se van”.
Sin embargo, los que están abandonando el partido de Manlio Fabio Beltrones aquí en Tabasco tienen nombres y apellidos, mientras que aquellos que “llegan” solo están en el imaginario de la dirigencia estatal.
La verdad, la verdad, el partido se le está desarticulando aún más a Valdivia de Dios y, hasta el momento, no se observa, no se palpa una estrategia clara, contundente, no sólo para atraer militantes, sino para permear en el gusto de la sociedad. Vaya, hasta la esencia de lo que debe ser un partido opositor perdieron.
Y es que al parecer esa silla de 16 de septiembre está embrujada, pues apenas se sientan en el cargo se transforman sus dirigentes. Así ha sido con los más recientes. No ven ni escuchan a nadie, creen que sólo su visión es suficiente para sacar adelante a un partido que carga sobre sus hombros años de culpas de gobiernos desastrosos e infinidad de cuestionamientos.
Un nuevo rostro del PRI en Tabasco no se ve por ninguna parte, y eso lo está aprovechando muy bien el partido Morena, particularmente, pues además de su dirigente estatal Adán Augusto López Hernández, ahora tienen a Manuel Rodríguez González y Evaristo Hernández Cruz. Los tres conocen muy bien las entrañas del PRI, ya que ahí se formaron.
Las relaciones que dejaron en el cuadro tricolor ahora la están aprovechando al máximo, ya que todos ellos recorren por separado los municipios y no precisamente para desayunar en sus mercados públicos.
Así que mientras Miguel Ángel Valdivia sigue pensando si lo van a sustituir o no de la presidencia, los de enfrente caminan día y noche, debido a que en el 2018 Andrés Manuel López Obrador se juega el todo por el todo en la elección presidencial y en los comicios de Tabasco.
El caso es que si el priismo tabasqueño continúa cruzado de brazos, seguirá el éxodo en el PRI hacia Morena, partido al que, dicen los que ya están instalados ahí, “es el partido del futuro en Tabasco”.