La inversión pública no genera crecimiento
09.05.2015 12:18
Durante su reciente visita a México, Joseph Stiglitz realizó un par de aseveraciones que son relevantes para México. La primera en el sentido de que nuestro país tiene una mayor “fortaleza macroeconómica por haber limitado su dependencia respecto a la evolución del petróleo. Un segundo aspecto que Stiglitz señaló es que la austeridad es una mala idea.

“Uno de los grandes errores de la austeridad extrema es que reduce el potencial de crecimiento” fue su puntualización. En este sentido la evidencia económica avala su reflexión, en la década de los ochenta los programas de ajuste macroeconómico minaron la base productiva de México y otros países de América Latina. La factura que nuestro país ha pagado es elevada: a fines de los años setenta el PIB potencial crecía a tasas de 6% anual, hoy no supera el 2.5%.
Sin crecimiento económico vigoroso y sostenido es imposible reducir la marginación y pobreza. El gasto público no representa el mecanismo para atender los rezagos sociales y la inequidad, para que esto ocurra es imprescindible contar con empresas generadoras de valor agregado y de empleo formal.
La debilidad del mercado laboral, resumido en su informalidad, constituye el sustento de otro de los puntos tocados por Stiglitz y que ya había sido comentado por diversos analistas mexicanos: la mayor proporción de los trabajadores no se encuentra en el camino de contar con un sistema de pensiones digno en su vejez. Esto representa un pendiente que puede transformar nuestro bono demográfico en un desequilibrio social adicional.
Descargar documento completo en formato PDF.