O movilización ciudadana, o declive nacional

07.01.2016 22:44
Este año habrá nuevas elecciones. Serán en 13 entidades. En 12 de ellas se elegirá nuevo gobernador. De ellas habremos de hablar más adelante. Lo que deseamos compartir con ustedes es una realidad interesante: los partidos políticos se están quedando sin líderes. Sus "cuadros" -así les llaman- son tan grises como el sistema político mexicano.
 
El PRD carece de líderes emblemáticos. Hoy, su líder nacional, Agustín Basave, mantiene su amenaza de renunciar a su partido no concreta alianzas con su "archirrival" ideológico: el PAN.
 
No hay una figura que pueda llenar los zapatos de políticos como Cuauhtémoc Cárdenas y Andrés Manuel López Obrador.
 
En Acción Nacional, están en las mismas. El neopanismo es el que manda y el expresidente Felipe Calderón está más activo que nunca tratando de colocar a su esposa, Margarita Zavala, como candidata presidencial en el 2018.
 
Sin Calderón y Margarita, ¿quién puede meterse a la arena política y electoral? ¿Su presidente nominal, Ricardo Anaya Cortés?, ¿Gustavo Enrique Madero? ¿La propia Josefina Vázquez Mota?
 
En el PRI están en las mismas: sus dirigentes caciquiles, Manlio Fabio Beltrones y Emilio Gamboa Patrón no la van a jugar. Vamos, se notan disminuidos frente al poder real del expresidente Carlos Salinas de Gortari.
 
¿Cuáles son los "ases" del PRI de Salinas?

 

  • Luis Videgaray, el secretario de Hacienda que tiene el dólar por encima de los 18 pesos.
  • Miguel Ángel Osorio Chong, a quien se le fugó el "Chapo" Guzmán y todavía no lo puede recaptur.
  • A Aurelio Nuño, cuyo único mérito curricular es su amistad con el presidente Peña y con el secretario Videgaray.
  • José Antonio Meade Kuribreña, que de canciller pasó a promotor insulso de la política social.
  • Claudia Ruiz Massieu Salinas, sobrina del ex mandatario.
 
¿Usted ve a algún otro político priista de peso pesado?
 
Vamos, hasta en Morena tienen el problema real del desgaste natural de López Obrador. ¿Quién tiene los tamaños para sustituir al tabasqueño?
 
Todo lo anterior viene a cuento porque la partidocracia y sus dirigentes están envejeciendo. Los ciudadanos están, pues, ante la gran oportunidad de poder ocupar los espacios que acapara de manera legal, pero poco legítima desde el punto de vista ético, la  actual clase caciquil.
 
¿Que eso implica organización? Sí. ¿Que implica una profunda recomposición social? También. ¿Que es un llamado a buscar patriotas talentosos y valientes? Por supuesto.  ¿Que implica que la ciudadanía sacrifique rencores, orgullos y envidias? Tal cual.
 
Si esto se logra, México podrá aspirar a un resurgimiento.
Si no... podría seguir en caída libre.