Todos los que atentan contra periodistas deben pagar por sus crimenes.
Por. Redacción PL.
Miércoles 10 de febrero de 2016.
CIUDAD DE MÉXICO.- La directora del Programa para América de Amnistía Internacional (AI), Erika Guevara-Rosas, demandó a las autoridades mexicanas que, "sin perder ni un segundo", investiguen el asesinato de la periodista Anabel Flores Salazar. El mensaje, subrayó, debe ser muy claro: "...quienes están dispuestos a no detenerse ante nada para silenciar a los periodistas tendrán que pagar por sus crímenes”.
AI manifestó hoy a través de un comunicado que el secuestro y asesinato de la reportera "es un trágico recordatorio de la angustiosa realidad a la que se enfrentan miles de periodistas de todo México, uno de los países más peligrosos del mundo para los profesionales de los medios de comunicación."
Recordó que el cuerpo sin vida de Anabel Flores Salazar, de 32 años, fue hallado en el estado de Puebla, a pocos kilómetros del lugar donde fue secuestrada por hombres armados el lunes. Anabel trabajaba para un periódico local en el violento estado de Veracruz, uno de los estados más peligrosos para los periodistas en México. Al menos 16 profesionales de los medios de comunicación han sido víctimas de homicidio allí desde 2010.
“Además, -agregó- México debe brindar la protección fundamental que necesitan los periodistas y otros profesionales de los medios de comunicación que trabajan en condiciones increíblemente peligrosas, especialmente aquellos que informan sobre crímenes. El dejar sin protección a quienes trabajan para exponer la sombría realidad de los abusos que se cometen en México equivale a tratar de barrer esos abusos debajo de la alfombra.”
Amnistía Internacional citó cifras de Reporteros sin Fronteras en el sentido de que 89 periodistas han sido víctimas de homicidio y 17 han desaparecido en México desde el año 2000.
Transcripción íntegra del documento de Amnistía Internacional
México: El brutal asesinato de una periodista especializada en crímenes deja patente la necesidad de protecciónFebrero 10, 2016 | Enlace a este comunicadoEl descubrimiento del cadáver de una periodista mexicana especializada en la información de crímenes, que había sido secuestrada el lunes, es un trágico recordatorio de la angustiosa realidad a la que se enfrentan miles de periodistas de todo México, uno de los países más peligrosos del mundo para los profesionales de los medios de comunicación. Así lo ha manifestado Amnistía Internacional.El cuerpo sin vida de Anabel Flores Salazar, de 32 años, fue hallado en el estado de Puebla, a pocos kilómetros del lugar donde fue secuestrada por hombres armados el lunes. Anabel trabajaba para un periódico local en el violento estado de Veracruz, uno de los estados más peligrosos para los periodistas en México. Al menos 16 profesionales de los medios de comunicación han sido víctimas de homicidio allí desde 2010.“Sin perder ni un segundo, las autoridades mexicanas deben iniciar una investigación exhaustiva sobre este brutal asesinato. El mensaje debe ser muy claro: quienes están dispuestos a no detenerse ante nada para silenciar a los periodistas tendrán que pagar por sus crímenes”, ha manifestado Erika Guevara-Rosas, directora del Programa para América de Amnistía Internacional.“Además, México debe brindar la protección fundamental que necesitan los periodistas y otros profesionales de los medios de comunicación que trabajan en condiciones increíblemente peligrosas, especialmente aquellos que informan sobre crímenes. El dejar sin protección a quienes trabajan para exponer la sombría realidad de los abusos que se cometen en México equivale a tratar de barrer esos abusos debajo de la alfombra.”Según Reporteros sin Fronteras, 89 periodistas han sido víctimas de homicidio y 17 han desaparecido en México desde el año 2000.