Gobierno no tiene voluntad política de reducir gasolinazos: sector patronal

Por: Redacción PL.
Ilustración: Pixabay.
Lunes 2 de enero de 2017.
 
CIUDAD DE MÉXICO.- El aumento de los precios de los combustibles es desproporcionado y atenta directamente contra la economía del consumidor final, señaló la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex).
 
A través de un comunicado, consideró que el mercado de precios abiertos es adecuado porque permite que la participación de más actores fije el precio final de acuerdo a la libre competencia; sin embargo, apuntó en México, el componente de impuestos que tienen los precios de  gasolinas y diésel es muy elevado, más del 40 por ciento.
 
Calificó de desproporcionado que el gobierno le traslade toda la carga al consumidor final y que no haya voluntad para revisar esquemas de reducción de cargas fiscales.
 
La Coparmex hizo un llamado al Congreso de la Unión para que revise y haga los ajustes pertinentes a la Ley del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS), a fin de aminorar las afectaciones y evitar su impacto directo a la economía de los consumidores finales. 
 
Señaló la importación de gasolinas alcanza ya el 60 por cientro del consumo nacional, debido a la limitada e ineficiente infraestructura de refinación del país, la cual opera por debajo del 60 por ciento de su capacidad.
 
Si logramos incrementar su eficiencia arriba del 90% (promedio de las refinerias del Golfo en los Estados Unidos), dejaríamos de importar petrolíferos equivalentes a $500 mdd mensuales, que al año representarían ahorros por  $6,000 mdd, aprox. $126,000 mdp, reduciendo la salida de divisas y generando más empleo y derrama económica en el país.
 
Subrayó la urgencia de acelerar la actualización de la infraestructura de refinación; así como la rápida apertura al sector privado para almacenamiento y transporte de gasolinas y diesel, y empezar a producir lo que actualmente se importa, y transportarlo a costos mas competitivos.
 
La Coparmex concluyó que "es paradójico que somos un importante país productor de crudo con una alta dependencia externa por la importación de gasolinas". 
 
Señaló la importación de gasolinas alcanza ya el 60 por cientro del consumo nacional, debido a la limitada e ineficiente infraestructura de refinación del país, la cual opera por debajo del 60 por ciento de su capacidad.
 
Si logramos incrementar su eficiencia arriba del 90% (promedio de las refinerias del Golfo en los Estados Unidos), dejaríamos de importar petrolíferos equivales a $500 mdd mensuales, que al año representarían ahorros por  $6,000 mdd, aprox. $126,000 mdp, reduciendo la salida de divisas y generando más empleo y derrama económica en el país.
 
Subrayó la urgencia de acelerar la actualización de la infraestructura de refinación; así como la rápida apertura al sector privado para almacenamiento y transporte de gasolinas y diesel, y empezar a producir lo que actualmente se importa, y transportarlo a costos mas competitivos.
 
La Coparmex concluyó que "es paradójico que somos un importante país productor de crudo con una alta dependencia externa por la importación de gasolinas". 
 
Demandó atender de inmediato a Petróleos Mexicanos (Pemex) para evitar que llegue a una situación "insostenible". Dijo que esta empresa no puede aguantar pérdidas anuales de 50 mil millones de dólares por la importación de gasolinas y exhortó al gobierno federal a permitirle recuperar su capacidad de refinación.