CIUDAD DE MÉXICO, 3 de octubre de 2015.- Occidente abandonó a su suerte a la población de Siria, pese a que los terroristas extranjeros comenzaron a matar, a decapitar y a descuartizar a la población civil, especialmente la cristiana, desde el primer día de la guerra, que comenzó hace cinco año, denunció el pasado jueves, la religiosa argentina María de Guadalupe (foto superior), al reunirse con integrantes del Club de Periodistas de México.

 

La misionera de la Orden del Verbo Encarnado, quien ha vivido en Siria desde antes del estallido de la invasión a Siria, agregó que la gente comenzó a decir "nos estamos muriendo. Nos están asfixiando. Vamos a morir hambre y de sed, mientras el mundo no lo sabe."

 

Recordó que en el 2011, cuando comenzaron los embargos económicos contra el régimen sirio; se levantaron las embajadas de todos los países  y también fueron retirados todos los extranjeros, "y la gente nos decía: 'ustedes también nos van a dejar'. No podíamos dejarlos. No podíamos."

 

"¿Por qué digo esto? -explicó- porque una de las cosas que ellos más sufren, además de la situación de persecución y guerra permanente, ¡es el abandono! ¡Es el abandono de Occidente! 

 

"Y las veces que ellos intentaron hacerse sentir, las veces que lo intentaron, salió al revés. Y veíamos a la gente en las calles de Aleppo (...) la gente salía a las calles para manifestarse, para hacer marchas, caravanas, para apoyar al régimen, a su Presidente. ¿Por qué? ¿Porque es lo mejor en el mundo, como régimen de gobierno? No debe ser lo mejor del mundo,  pero estaban bien. ¿Por qué imponerles desde afuera otra cosa? Los cristianos estaban protegidos", subrayó.

 

"Cuando la gente salía a la calle y hacía sus caravanas, la televisión mientras tanto -porque lo veíamos nosotros, en las noticias- la televisión mostaba las imágenes y subtitulaba, debajo, y explicaba: 'continúan las manifestaciones pacíficas de la gente en Siria, que sale a la calle, pidiendo a su Presidente que se vaya porque quieren democracia'. ¡Exactamente al revés de lo que intentaban decir! Se estaba anulando totalmente la voz del pueblo..."

 

La religiosa advirtió que si esa situación no se detiene en Siria, todos iremos a parar a manos del extremismo islámico.

 

Foto: Cortesía de Celeste Sáenz de Miera.